lunes, febrero 27, 2006

Qué tan correcta es la correción política I


De un tiempo para aca no está mal decir lo que uno piensa, simplemente es incorrecto, por no decir incomodo, exponer nuestro pensamiento asi de simple, sin decoro, es sobre todas las cosas ofensivo, debe uno tener cuidado con lo que dice, por que muchas personas sensibles se pueden sentir agredidas, lastimadas, señaladas.
Insisto en el asunto de que en nuestros tiempos el pensamiento ha sido limitado por todo frente posible, se cumple la sugerencia de John Giorno: nunca digas lo que piensas, nunca, pero nunca digas lo que piensas, mucho menos si es verdad es decir, si ese pensamiento es verdad en quien lo expresa, Porchia más dramatico apunta: la verdad tiene muy pocos amigos, y la mayoria son suicidas.
Actualmente la verdad es un tema prohibido, ante el escudo totalitario de preguntar ¿qué es la verdad? nadie se atreve a decir nada, creo que poco a poco hemos ido perdiendo el valor de creer que lo que pensamos, aunque sea equivocado es una de las tantas verdades que habitan este mundo, lo que se ha logrado con la correccion politica es que estas verdades individuales sean ignoradas, no por que no sean ciertas, sino porque simplemente son incomodas, tal vez las ideas de un obrero no sean muy elevadas, pero como estan hechas a partir de una realidad inmediata, deberiamos considerarlas validas.
El poder se ha dedicado a descalificar todo pensamiento independiente, al grado de lograr poner límites a los mismos artistas: esas personas que no debieran conocer límite alguno, personas que jamas deben detenerse en lo que piensan los demas, ahora buscan qué es lo correcto, qué es lo que se puede decir este control ha hecho que el artista defienda sus actos pero no sus pensamientos, el creador se siente con derecho a todo, menos al mas elemental: expresar sus ideas.
Es común encontrar que las aclaraciones que hacen los artistas son más extensas que el texto que generó el escándalo, y más que común es tristísimo que el artista se la pase diciento que sus palabras fueron malinterpretadas o sacadas de contexto, es raro ver que un artista se arrepienta de lo que dijo como es normal pidiendo disculpas a ciertos grupos que resultaron ofendidos por su obra.
Puede ser drogadicto, mujeriego, un verdadero infame, puede hacer lo que quiera con su vida, menos agredir a las buenas conciencias, de alguna forma u otra el artista ha venido siendo controlado por el sistema, le da miedo ofender, lastimar a alguien sin querer, qué clase de artista va a salir de ahí, de esos habitos y de esas limitaciones impuestas por el entorno: un artista que no vale nada.
Acepto que es valido decir que un artista es un imbécil por hablar de cosas que no sabe, pero no se le puede llamar imbécil a un artista que expresa su sentir sin consideraciones hacia los demas, porqué, porque son sus ideas, y si alguien las considera correctas o equivocadas está en su derecho, al igual que este tiene el derecho a expresarlas.
El que escribe pensando en las mayorias lleva todas las de perder, la mayoria es un cimiento construido en la arena, no podemos saber que es lo que piensa la mayoría, de ahí viene el gran error de los que creen tener la verdad en sus manos sólo por saber lo que piensa la mayoría.
Detenernos a pensar en los otros a la hora de expresar nuestras ideas es un error, lo es porque nuestro pensamiento es un ejercicio individual, ser correcto es limitar nuestras ideas, seguir de esta forma aleja al pensamiento de su raiz primordial: el ser honesto, el ser sincero.
Si estamos hablando a favor de la mayoria no debemos tener miedo a lastimarla, y tampoco creo que seamos capaces de lastimarla, desde cuándo un escrito los ha hecho más pobres, más ignorantes, más indefensos, nunca, a final de cuentas, alguien tiene que decirles las cosas como son, lo que nos salva es saber que no estamos mintiendo, y sobre todo, que no tratamos de aprovecharnos de ellos a través de la escritura ¿Qué perdemos nosotros que no prometemos nada.
A escribir entonces, defendiendo el gran pensamiento bélico:no se puede hacer un omelette sin romper algunos huevos.

jueves, febrero 23, 2006

RBD


Me resistí a la sugerencia puesta en el tag por algún gracioso, pero la idea no me resulto tan mal, desagradable si, pero no tan mala, que un grupo juvenil cause caos y desastre en un pais no es una novedad y mucho menos un fenomeno, lo que si puede tranquilamente llamarse así es al pais donde eso sucede, no quiero perder el tiempo hablando de valores musicales o literarios en la obra que estos jovenes ofrecen, es por de mas sabido que en ese producto comercial entra gente con talento en cuestion de ventas y mercadotecnia, que hay una inversion considerable de billetes en producir discos y eventos masivos, y que ademas existen practicas viejisimas para mantener un éxito en la radio.
La onda de RBD es muy obvia, ante los monopolios en los medios masivos de comunicación cualquier cosa que estos se propongan tiene que funcionar, dado que no existen alternativas, la admiración y el éxito se obtienten facilmente, invadiendo el radio, los medios impresos y por supuesto la televisión cualquier mercancía disfrazada de “rebeldia’ se vende con facilidad, hasta ahora el televisor sigue siendo el dictador de casi toda casa mexicana, si no se tienen los recursos para pagar televisión por cable que asi de pasada no es mas que mierda con opciones, la gente no tiene otra opción que tragarse lo que le sirvan.
Y si en este mundo existe alguien con estomago de perro para hacerlo son nuestros adolescentes educados en un modelo de consumo y cero incertidumbre, el señor televisor es ya no el mejor analgesico sino uno de los alucinogenos mas poderosos que existe desde el siglo pasado.
En qué cabeza cabe que una adolescente de la periferia compare la vida de un personaje de ficcion cuyos problemas se desarrollan en un colegio que parece un complejo de departamentos para solteros de 16 años.
La novela disfrazada de “realidad juvenil” le ofrece al público joven un escape, una variante atractiva, muchachas con corbata y zapato de tacón acudiendo a una escuela preparatoria, creo que ni el mejor congal tienen un uniforme tan atractivo.
Esa escuela es una fantasia algo ranchera de lo que debería ser cada escuela, para empezar no hay pobres, ni chaparros, mucho menos prietos, habrá un moreno pero como elemento exótico, asi como que muy caribeño, jamás aparecerá nuestro color de piedra negra con acento costeño.
Sigue que los chicos se drogan, se alcoholizan, las chicas son anorexicas, bulimicas y maniacodepresivas, pero a final de cuentas todas esas partes oscuras se ponen bien alegres a la hora de cantar, hay amor, celos e intriga, envidias, cofradías, diferencias, distancias, problemas familiares que suceden en la vida real, como el de la pobre muchacha a quien su padre nunca atiende porque sus negocios millonarios le mantienen ocupado todo el tiempo, el padre trata de reponer el daño de la ausencia con autos, perfumes y trapos caros, trata de poner en claro que si ama a su hija pero no tiene el tiempo pero si el dinero para quererla.
La verdad es algo un poquito distinta, el padre de la muchacha jamas tiene tiempo de expresarle cariño porque todo el dia esta partiendose el lomo cargando bultos, destapando caños, costruyendo casas ajenas, recogiendo basura o armando arneses, a lo mas que llega este pobre individuo es a comprarle un disco pirata de esos RBDS que tanto le gustan a la chiquilla, y la chiquilla se lleva a la calle esa ficcion e ignora que su prepa esta toda mugrosa, cayendose a pedazos junto con los pedazos de adolescencia que le tocaron vivir con su noviecillo mariguano o alcoholico que terminara embarazandola en el menor descuido, y luego sigue la expulsión porque en su escuela no hay anorexicas, ni bulimicas, ni drogadictas maniacodepresivas, sino muchachas embarazadas que son un mal ejemplo para las demas, y el padre ahí va que en vez de discos y perfumes piratas ahora le lleva pañales al nieto que le apareció de pronto.
Aunque tampoco hay que generalizar. La otra opcion esta en la chica que descubre que RBD es un buen escape al tedio y la furia que la habita todos los dias, aunque se consiga un buen novio sabe que este jamás llegará en un carro nacional de año, jamás conocerá el mar, no el de cancún, jamás tendrá un baile elegante de nada, ni siquiera de graduación, esa telenovela la sana al menos por una hora de la realidad salvaje donde vive, la radio y la imagen de una prepa de fantasia la separan brevemente del infierno de pobreza donde vive: un barrio violento lleno de picaderos, violencia domestica propia y ajena.
Ver RBD no le causa ninguna ilusión, no le provoca la mas minima esperanza, trata con el breve esfuerzo de la fantasia encontrar similitudes con lo que ella vive y lo que sucede en el televisor, terminado el capitulo sigue planchando la ropa de toda su familia, repara la suya y se prepara para el mismo, rutinario y casi infernal dia siguiente, sus ilusiones son breves, a lo mucho duran esos 60 minutos (comerciales incluidos) que le pertenecen a cada capitulo, su vida es otra, pero al menos eso le ha servido de analgesico, la hecho sonreir, preocuparse por otros aunque sean ficticios, su vida tan triste encontró en el televisor algo que comentar al día siguiente.
Entonces viene lo bueno, esa gente que sale en la tele visitará su ciudad, esas personas que son actores pero que para ellan representan algo real estarán es la ciudad donde ella vive, ese personaje con el que se identifica o del que esta enamorada llegará de carne y hueso a este infierno donde ella sobrevive a diario.
De ahí en adelante todo es posible, mirarlo a los ojos, mirarlo de cerca, tal vez tocarlo, tal vez todo, la fantasía desatada de pronto. El desorden es obvio entonces, cada vez que RBD toca el piso de cualquier ciudad significa que en la tierra, en esta vida la fantasia de cualquier adolescente es posible.
Que tengamos un pais donde esto todavia sucede no es un fenomeno, debo admitir que me equivoque al principio, un pais donde una muchacha tiene sus ilusiones en algo que es un negocio de lo más vil, donde las fantasias de un o una adolescente surgen de lo que le ofrece un televisor, donde su espiritu y sus ambiciones son dictadas por otros, donde la esperanza sólo es posible en un producto comercial y sin sustancia, un pais donde los más debiles siguen soñando lo que los poderosos quieren que sueñen, donde ser rebelde es a final de cuentas cantar de alegría bajo el sometimiento de los que tienen el poder no es un fenomeno, es una vergüenza.

La telenovela mexicana o la industria de la ilusión improductiva


Jamas veremos una telenovela donde el ser humano pueda reconocerse completamente, la telenovela no esta hecha para eso, la identificacion es suficiente, saberse pobre pero feliz debe ser suficiente, este formato de domesticación masiva tiene un fin utilitario y adoctrinador, a qué tiene esperanza toda mujer profesionista: a casarse con un hombre de buena familia, esa sigue siendo la enseñanza, y un hombre de buena familia no se refiere a unir su vida con alguien educado en los altos valores de humanidad sino con alguien rico.
Si hace unos veinte años la sirvienta lograba enamorar al primogenito millonario, ahora es la joven profesionista educada en una universidad pública que por un golpe de suerte logra entrar al mundo de las grandes corporaciones, esa es la ilusion triste y simple, que la muchacha pobre se esfuerze en estudiar una carrera universitaria, en aprender ingles y en partirse la espalda frente a un escritorio para que algún dia como en las telenovelas el hijo del patrón descubra en ella el verdadero amor, y si nos ponemos a pensar y en ennumerar donde han terminado nuestras jovenes compañeras de universidad descubriremos con tristeza que la formación televisiva no ha fallado, nuestros mejores talentos han terminado casadas, con hijos y sin dedicarse a lo que estudiaron. Seria gracioso si no fuera verdad.
Parece que algo de televonela les quedó a todas las chicas que conocimos en nuestra juventud. Tantos años de estudio, tanta friega, tanto verlas ahí, defendiendo como lo que son: los mas fuertes animales de nuestra especie, su derecho a estudiar, a tomar sus decisiones, a tomar su verdadero lugar en el mundo para terminarlos así, fundando su hogar en una estructura patriarcal, dependiendo totalmente de los caprichos de otro, dejando sus vidas, su alma y su cuerpo en las manos de otros pero felices.
Vivimos en la gran ilusión de que todo se arregla de manera imprevista, vivimos dormidos en el sueño de que las cosas por si solas se pueden mejorar, de que los problemas se resuelven por si solos, y en ese no hacer nada, en el no intervenir, nuestra vida se vuelve un triste carnaval de fracasos, nunca tuve la oportunidad, si a mi me dieran esto o aquello, en ese esperar nos acercamos a la tumba casi sin darnos cuenta, entre que nos cae el veinte y nos hacemos viejos nos damos cuenta de que alguna gente no se acercó a nosotros con buenas intenciones, que lo mejor que podiamos hacer era ahorrar unos centavos, ser prudentes, pero no, la televisión nos enseñó que lo bueno debe llegar sin esfuerzo, que sólo hay que portarse bien, ponerse comodo y esperar a que alguien rico descubra nuestro talento.
Y asi, en el claro fracaso de nuestra vejez, es esta espera, es esta ilusión improductiva reclamarle comodamente a los jovenes todo lo que queramos: acaso creen que el dinero crece en los arboles, nadie aprende en pellejo ajeno, uno les dice porque uno sabe, a mi me fue como me fue porque nunca escuche consejos, pongan atencion en lo que les digo, todos son iguales, por unas monedas se perdió roma, y mas vale de una vez que mil veces muy tarde, y qué horas son, ah canijo muchacho por estar platicando contigo se me anda pasando la novela, anda prende la tele, ponle en el dos, luego platicamos.

miércoles, febrero 15, 2006

¡Que vivan los toros!


Pues aprovechando que la mayoría estå hablando de otros bueyes que viven en Puebla, le entro por fin al asunto de Pajarito como saben, el animal que llevaba este nombre saltó la barrera en una plaza de toros, dejó 6 lesionados y otras once personas con lesiones leves y crisis nerviosa.
De ahi en mas, el llamado a saltar las barreras de las plazas de toros hecho por Pajarito a todos los toros de lidia del mundo fue un fracaso, el espectáculo fue breve y se demostró que los toros sin torero pues la verdad no dan para mucho, si la gente a la que le gusta el toreo quisiera ver como un toro salta encima de otra gente desde cuando los entrenarían (por medio de torturas horripilantes) para que hicieran eso, por lo tanto, estoy de acuerdo en que los asistentes ha dicha corrida se hayan disgustado con Pajarito, si quisieran ver un toro volador hubieran ido a un circo.
Lo preocupante es que la gente que no le gusta el toreo considera que a los que si les gusta merecen morir, y si se puede, con un toro cayéndoles encima, no entiendo porque seguimos siendo así, ¿de dónde nos salen sentimientos tan malos? Serán causados por la carne de res que comemos nuestros deseos de venganza cada vez que vemos una foto del torero? ¿O Nuestros lindos zapatitos de piel? ¿O nuestra chamarra sucia pero buenera de norteños melancolicos? ¿O serán el yogurth, el queso, los tacos de barbacoa, la nostalgia por la carne asada, la carne seca de las cantinas, o tal vez el asunto sea más complejo, y sentimos pena, furia y odio causados por los burros de chicharron, o los pollos del smart, el coctel de camarón, el abominable huevo con jamón, ave y cerdo destruidos por nuestra hambre? dios mio, en qué nos hemos convertido, a través de todo lo que nos comemos el espíritu de los animales busca reinvindicarse: Sí, que mueran todos los pinches toreros por culeros, el domador de leones, la chica de las focas, que todos los animales se rebelen, hasta la jirafa del parque central nos debiera saltar encima, los patos del estanque, que los perros horneen al taquero, que las ratas se coman a los chinos, debemos darle la razón a los animales, todo aquel que atente contra la dignidad y vida de esta santas criaturas debe morir de manera ejemplar para que las siguientes generaciones sólo coman plantitas.
Creo que a mi ya me esta pegando el alucine antihumano, ha de ser porque de niño tras una terrible cirugíá dental sólo comí gelatina* por tres meses. muu, mmmuuuu. mmuuuu

*La mayoría de las gelatinas están hecha con huesos, pieles y tendones de animales hervidos por lo general de vaca. Se le agregan saborizantes, mmm, gelatina de limón

¿Mi libro favorito?


Cada vez resulta más difícil responder a esta pregunta, dar una respuesta simple y precisa me parece inapropiado, o mejor dicho incorrecto, para empezar hay que decir que tal libro no existe, que con el tiempo la palabra favorito no es la más adecuada para un libro, es cierto que el ejercicio de la lectura va ligado al placer, pero no sólo a eso, y por eso considero que ese termino afianza la idea de que la lectura debe ser algo divertido, la palabra en si me parece frivola, ajena al mundo de los libros y la lectura.
Al responder uno esta pregunta se supone que uno menciona los libros que nos gustan pero, suponiendo que alguien tome estas respuestas como una guía de lecturas, es probable que se lleven alguna decepción, a mi me gustan los libros tristes, crueles, el humor negro, los cuentos de terror pero tambien los realistas, me gusta leer la narración de una desgracia, me gusta la literatura que nos enfrenta con las tinieblas que habitan nuestro corazón, las luces, la esperanza, las obras conmovedoras no son de mi predilección salvo excepciones, hay veces que releo los pasajes tristes como aquel donde Teresa y Tomás, personajes de La insoportable levedad del ser entierran a Karenin (su perro) y con él todo vínculo posible. Un texto de Monterroso que se llama Llorar orillas del Rio Mapocho tambien me gusta, los aforismos de Cioran, los articulos de Ibargúengoitia, los libros de Groucho Marx, It de Stephen King, pero usar con estos libros y estos autores las palabras "me gusta" o "mis preferidos", no me place, ni que estuviera uno comprando nieves o burritos. El asunto va más allá, a veces uno prefiere leer cosas que nos duelen, que nos hacen dudar de lo que sabemos, uno lee no para sentirse bien o para divertirse, a ciertas personas leer no nos resulta edificante, al contrario, esa sensación de desamparo y destrucción es lo que nos gusta tener cada vez que un libro termina frente a nuestros ojos, nada de diversión, placer, esparcimiento, no, nada de eso, a mi me llenan los libros que duelen, que pueden sentirse y que permanecen en nuestra vida como una experiencia más, asi que no tengo libro favorito, ningun libro me gusta, los que releo es por masoquista, porque me duelen, incluso cuando me hacen reir se que me están doliendo.

martes, febrero 14, 2006

Hablar sin poder hablar


-Tio, Diego dijo una mala palabra en la escuela. ¿No lo van a regañar?- nos dijo Alexa el otro día
-¿qué palabra dijo?- preguntamos Vera y yo
-no puedo decirla, es una mala palabra- nos contestó
-andale dinos, no nos vamos a enojar- insistimos
-dijo la palabra pito-
-esa no es una mala palabra- le dijimos y terminamos el asunto.
Yo quería investigar en que contexto lo habia dicho, jalame el pito, me pelan el pito, chupame el pito, o me vale pito y supongo que alexa sabe que los niños dicen pito en vez de decir pene, y el joven Diego lleva días entretenidisimo con cualquier cosa donde pueda oír malas palabras, con la película Temporada de Patos se la paso risa y risa, todas las groserías le parecen graciosas, creo que es natural, y que no tiene nada de malo, falta enseñarle que esas palabras tienen su lugar y su momento, pero de ahí en más, cualquier palabra que la gente dice para expresar su coraje o para dejar en claro algo me parece valida, es decir una buena palabra.
Lo que me preocupa es que muchos niños sigan creciendo con la idea de que existen malas palabras, recuerdo que en los años cuarentas la palabra cáncer estaba prohibida hasta en los hospitales, como si el no mencionarla fuera suficiente para que la enfermedad no existiera, incluso Leonard Cohen tiene un poema al respecto que se llama I wanted to be a doctor y viene en Flowers for Hitler
Aunque tambien nuestra terrible comedia mexicana ha logrado que cualquier frase, por casual que sea termine siendo una verdadera obscenidad, ahi el grosero es el que escucha, no el que lo dice, de seguir asi las cosas, Alexa va a venir con el cuento de que Diego dijo una mala palabra cada vez que diga: palo, macana, garrote, leño, dedo, chile, camote, banana, salchicha, guini y etcetera etcetera, etcetera.

II
Juan Goytisolo que para mi es una lumbrera lleva decadas quejándose de lo que hoy me quejo, los medios, la academia y los políticos se han dedicado por mucho tiempo en convertir al idioma español en un remedo de lo que fue, con extrema insistencia han logrado que poco a poco la gente hable menos, y que no escriba nada, atacado por los dos flancos: la falsa erudición de las academias y la estudiadisima vulgaridad de los medios, junto al elocuente cinismo de quienes nos gobiernan han dado por resultado un silencio absoluto por parte de los otros, los sometidos.
De alguna forma u otra han logrado su cometido, hacernos enmudecer, hacernos desconfiar de lo que decimos, someternos ante la incertidumbre de si estamos diciendo lo que queremos expresar, Goytisolo sostiene la teoría de que si se logra someter un idioma se somete el pensamiento de ese pueblo, esto esta pasando en todos los idiomas, pues para terminar de darle el golpe mortal a nuestro bello idioma español se unen a estos guardianes del deterioro la imposicion de la corrección política y la extraña fantasía feminista orquestada por algunos hombres de que tambien el lenguaje comete abusos de género, es decir que a la hora de hablar tambien somos (si no tenemos cuidado) unos misoginos.

A esta discusión tambien le ha entrado Javier Pérez Reverte con su texto contra la correccíon política negro es negro, y moro es moro, sudaca es sudaca y asi las cosas porque lo correcto es llamar las cosas por su nombre y no tener verguenza de las cosas que nos aquejan y que nos molestan, a poco por decir gente de color en vez de negro la discriminación va a desaparecer, o si en vez de decir prostitutas decimos sexo servidoraslos padrotes y los policias dejan de explotarlas, la misión de la correción politica es mantener a la hipocresía como una práctica valida para sobrevivir, para sentirse bien al no decirles jodidos a los jodidos, mejor uso el termino pobreza extrema, que se oye mejor que decir que hay un montón de gente que no come en tres días, y que aparte son un chingo, asi, llamándole pobreza extrema cada quien se imagina lo que quiere: pobres no han de tener agua, no tienen lana para el doctor, que significará para un rico ese termino? pobres cabrones no han de tener ni chofer, snif.

Y luego la academia aferrada a que el pensamiento solo se puede expresar a traves de retorcidas y complicadas estructuras, que las ideas sólo pueden funcionar si se les somete al terrible ejercicio de extenderlas hasta que desaparezcan, aqui tambien se somete al idioma bajo el pretexto de elevar el pensamiento, cuando el resultado es todo lo contrario, las ideas son extensas pero no profundas, el pensamiento es complejo y nada claro, parece todo escrito en clave, sólo para algunos iniciados y elegidos, todos parecen haberse confabulado para que el idioma se vuelva un fruto prohibido para la gente simple, es en serio, cada vez hablamos menos, usamos menos palabras, llegará el momento en que todos pronunciemos monosilabos, luego los gruñidos, y entonces si, valdremos pito.

jueves, febrero 09, 2006

Preocupaciones por la memoria


De un tiempo para acá mi memoria a largo plazo empieza a funcionar de nuevo, algunas cosas que parecían perdidas para siempre entre el amasijo de neuronas veteranas han vuelto a aparecer en mi memoria, otro sintoma alentador es despertar con el recuerdo nitido del sueño interrumpido.
En cuanto a los sueños, me gusta comprobar que en mi cabeza existe una ciudad imaginaria que he recorrido en distintas etapas de mi vida, ayer volví a soñar con un bar inexistente entre la 16 de septiembre y la vicente guerrero, ese bar que parece edificio de principios del siglo XX tiene unas escaleras en el exterior, el piso es verde oscuro y casi negro, una barra rectangular y nada de mesas, lo curioso es que el bar es amplio y sólo la barra esta iluminada con una blanca luz celestial, todo lo demas es oscuro y difuso, no se alcanzan a ver nada mas allá de lo que ilumina la barra. Me gusta soñar con ese bar que no existe, que yo recuerde nunca he bebido un trago en ese bar, pero siempre que llego el dueño y sus parroquianos me saludan o nos saludan en caso de que llegue acompañado.
Me gusta pensar que mi memoria esta volviendo a funcionar, que no todo está perdido y que poco a poco los buenos y malos recuerdos terminarán ordenados en los cajones de mi craneo. Sigo con la idea de que pronto se inventará un aparato que grabe nuestros sueños, la imagen es realmente lo que hace falta para que no olvidemos de inmediato el sueño interrumpido, los diarios de sueños no funcionan, al menos no a mi, algunos esotericos dicen que funcionan para resolver nuestros problemas, para tener un avistamiento del futuro, que los sueños en su conjunto pueden darnos señales de lo que sucede a nuestro alrededor y que nosotros no percibimos a nivel consciente. El asunto es que me alegra ver que mi memoria regresa poco a poco.

El viernes pasado mirando la noticia de la bebé que sobrevivió en un bolsa de plástico lanzada al mar, Vera me contó una historia desconocida donde yo era el protagonista, en la casa de san lorenzo yo rescaté a un cachorro que habían lanzado igual que a la bebé de brásil, envuelto en una bolsa fue tirado en una toma de drenaje de un metro y medio de profundidad que estaba en un extremo de la casa, los lamentos del cachorro me hicieron buscarlo, lo que sospechaba es que el animalillo estuviera atorado entre los muros, debajo de un auto o en cualquier otro lado menos ahí, cuando descubrí dónde y cómo estaba me pareció un gesto bastante inusual y cruel, lo saque con dos ganchos de la ropa, lo lavamos con agua caliente y tratamos de alimentarlo con un biberón que compre en la farmacia, el cachorro tenía a lo mucho un día de nacido, tenía los ojos cerrados y estaba muy débil, no lo resistió, murió a la tarde siguiente. El pequeño Diego, quien había visto todo el alboroto que causo el fugaz habitante de la casa preguntó inmediatamente donde estaba, dice mi esposa que hasta le había puesto nombre. La historia es triste porque me demostró que a veces al destino no lo detiene nada, que a veces intervenir es inútil, en eso estaba cuando Vera me dijo que al menos había pasado sus últimas horas tratado con respeto y cariño, que al menos tres pares de manos acariciaron su pequeña cabeza, en fin que se fue con una mejor impresión de este pinche mundo que lo lanzó a la mierda en cuanto nació.
Al final pensé que Vera tenía razón, lo triste es que si no es por ella, jamás me hubiera acordado del asunto.