domingo, noviembre 28, 2004

Pues qué pasó


"lo que pasa es que la gente ya está harta, y a eso se expone la gente honesta cuando forma parte de una institución llena de criminales" con esas palabras mi padre terminó una conversación que apenas iniciaba, sin más que decir cambiamos de tema.
Días después vuelvo al asunto, la breve frase de mi padre en relación al asesinato de dos policias en Ixtayopan es el resumen de las ideas que me pasaron por estos dias.
La condena es valida pues el hecho fue lamentable, todos los textos en relación al crimen son un llamado a la calma, a tomar conciencia y en general, una sutil invitación a avergonzarnos como mexicanos.
Hasta ahora nadie a dicho que lo sucedido es algo lógico, natural, y que lo único extraño es que no hay sucedido antes, si en este linchamiento las víctimas hubieran sido unos asesinos o secuestradores la condena seguiría siendo lo común de las opiniones, pero tendrían un tono menos lamentable, lo que distingue a este linchamiento de los otros es que las victimas eran inocentes, y elementos de la PFP.
Al parecer con el linchamiento lo que la multitud busca es tener los privilegios del crimen organizado: la impunidad y los derechos de nuestro sistema jurídico: una pésima impartición de justicia.
Los analistas no se cansan de dividir a la población,suponen que los otros, los ciudadanos con preparación académica, con mejor nivel de vida no serían capaces de realizar un acto de este tipo, es fácil decirlo, la verdad me gustaría que eso fuera comprobado. Otros hablan de descomposición social, de escasez de valores y un sin número de terminos que aluden y acusan a la sociedad.
Creo que todos los analistas se quedaron con ganas de decir otra cosa pero no lo hicieron, que fue lamentable, vergonzoso, que no se debe de repetir, que no se debe tomar la justicia por su propia mano, todos, absolutamente todos hicieron un lastimero llamado a la cordura. Ninguno ha dicho, pero estoy seguro ha pensado lo mismo que mi padre.
Si se trata de buscar culpables mucha gente tendría que estar en la cárcel, y no me refiero a los que aparecen en los videos, estamos hablando de un crimen injusto en un país donde la impunidad tiene mas de 30 años sin ser vencida, y donde desde hace 90 años la impartición de justicia sigue siendo todo menos justa,los criminales no pisan la cárcel, los inocentes son torturados o extorsionados, las instituciones que tienen que ver por nuestra seguridad están infestadas de secuestradores, traficantes de personas o de drogas, jefes de organizaciones criminales y corruptos. Quieren encontrar culpables, entonces hay que ver hacia el pasado, la gente está harta, se siente imposibilitada ante el crimen que inunda las calles, ante el conocimiento diario de que algunos elementos de la policia son más que corruptos unos criminales, la idea de justicia es una de las tantas fantasias mexicanas, qué le queda entonces, hacerse justicia por su propia mano, castigar sin juzgar tal como lo hace la justicia mexicana: encarcelados sin juicio ni sentencia, detenidos sin orden de aprehensión, encarcelados por matar en defensa propia, golpeado por policias por delatar a un narco, asesinado por denunciar a un judicial secuestrador, ser linchado por ser policia.
La ira, el salvajismo y la sangre fría no encontrarán jamas justificación, pero las razones y los motivos existen; algo que destaca entre todas las declaraciones es aquella que dice que nos los golpearon por ser policías, que los confundieron con criminales, lo que sirve para señalar algo más grave: el saberlo no los detuvo, el comprobar que eran policías no aumentó la furia, pero tampoco la contuvo, de entre todas las cosas esa me llama la atención, así como a varios presos no les basta ser inocentes para ser liberados, a las víctimas no les fue suficiente su caracter de autoridad para detener su muerte en manos de una comunidad enfurecida.

Pues qué pasó 2:
Dejen que el DF arda


Que han hecho nuestras autoridades, en vez del tradicional gesto de rasgarze las vestiduras, es decir buscar lástima y compasión reconociendo la culpa (gesto ya desaparecido por Fox y Lopez Obrador), han optado por lo nuevo: escupirselas, echarle la culpa al otro, argumentar que eso no es de su competencia y demas burradas propias para esta ocasión.
Por otro lado parece que la consigna nacional, la orden que viene desde arriba es "dejen que el DF arda", lo triste es que si esto es cierto las autoridades del DF han colaborado de lo lindo con esta misión, de todos los terrenos políticos el DF es donde todos hacen sus movimientos con "pinzitas, lo raro es que esa "delicadeza" para con todo sólo ha dado malos resultados, al grado de que ninguna autoridad tiene (aguantar la risa o las lágrimas) AUTORIDAD en el DF; nadie puede intervenir, antes que meter mano dura contra el crimen hay que tipificar el delito, es federal, le corresponde a la PFP, a la AFI, al departamento de seguridad del DF o a la ONU, mientras alguien tarda unas dos horas en aclarar que respecto a esa cuestión no hay nada claro, decenas de personas violan la ley diariamente.
Si las multitudes marchan violando varias leyes de transito, pero sobre todo, violando los derechos de otros las autoridades no saben que hacer, Mientras la multitud invade el Congreso, lugar que debería ser tan respetado como la misma bandera, aunque viendo la clase de alimañas que lo han tomado por asalto plurinominal no ha sido respetado por las mismas autoridades, el asunto es que el DF es donde hay mas elementos de distintas policias que cualquier otra ciudad del país, se comprende que dado el tamaño y su población así tiene que ser, pero es la única parte del país donde estos elementos de seguridad estan imposibilitados para actuar por simples cuestiones políticas, lo mejor que se me ocurre es que se distribuya en el país al menos a la mitad de policias del DF para que se dediquen a lo suyo en cualquier otra ciudad donde no viva uno de los candidatos mås populares a la presidencia y donde el cumplimiento de la ley no genere incomidades políticas. Lo otro es pedirle a Lopez Obrador que por única vez rompa la ley aplicándola.

Pues qué pasó 3:
¿Avergonzarnos? ¿De qué?


Los medios han vuelto a mostrar su mejor carta, echarle la culpa a otros, a pesar de innecesario hay que insistir en que los medios han demostrado ser los mejores colaboracionistas en estos días de incertidumbre, que mejor que apoyar a las autoridades en el discurso de que la sociedad es la que esta enferma, que el linchamiento de la semana pasada es uno de los tantos sintomas de dicha enfermedad, una multitud de gente a la que las opciones se le han terminado son el simbolo del cáncer que aqueja a este país, la sociedad que vive repartida entre la bestia de tres cabezas que es nuestra ridicula democracia no puede manifestarse de ninguna forma que no sea ilegal, la marcha, el motín o el linchamiento son aunque muchos no lo crean los únicos actos posibles donde la legalidad ya no sirve de nada, denunciar para qué, pedir más seguridad, eso se hace todos los días, la sociedad sobrevive ante la indiferencia de sus autoridades, por ejemplo, algún senador o diputado ha mencionado la iniciativa para que la sociedad pueda expulsarlos de la Cámara al mostrar incompetencia o falta de preparación, alguien ha insistido en desaparecer a los plurinominales, alguien ha pedido que el estado deje de financiar a los partidos políticos,seguirán siendo los criminales las personas más respetadas por la ley.
No digo que salgamos a la calle a buscar sospechosos y golpearlos aunque resulten ser policias, soy sincero, yo si pediría el linchamiento público a criminales despues de un juicio justo, a los criminales jamás se les detendrán con la tibia amenaza de penas mayores, pena debería de darle al Poder Judicial salir a la calle diciendo que ahora sí, que los crimenes como el secuestro serán castigados con mayores años de cárcel, por favor, los criminales ni siquiera se ensucian los pies en los miserables ministerios públicos, no eso lo hacen las víctimas que si tienen que acudir a levantar una inútil denuncia, y donde son acusados de torpes, ingenuos e imprudentes por las personas que se supone estan para ayudarlos.
El linchamiento de tres personas y homicidio de dos de ellas tal vez sea una de las tantas cosas que debería causarnos verguenza, ¿pero nada más a nosotros? Creo que debe darle verguenza a todos, mas a nuestros gobernantes,que no han hecho nada, y que si representan los gestos moribundos de una politica social, verguenza el letargo civil en el que estamos, si las opciones son callarnos o linchar al sospechoso, yo les confieso que añoro el día en que una señora arguendera grite a la salida del congreso: "ahi va el que aprobó el fobaproa y tienen a nuestros hijos sin comer", o, "ese es el que se roba el dinero de pemex y nos tiene bien jodidos o ya en casos extremos "este votó por vicente fox y este otro sigue votando por el pri". Linchemonos pues, sin remordimientos, total, en un pais sin ley, el que golpea primero es rey.

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