La ley y la tortuga: la paradoja y sus soluciones
El caso del hombre que tomó una tortuga del Rio Bravo sigue causando indignación en una ciudad donde la mayoría de los crimenes y délitos permanecen impunes, mientras los asesinos y ladrones tranquilamente realizan sus actividades durante las 24 horas que tiene el día, un hombre de 35 años permanece en el CERESO por el triste delito federal de haber sido sorprendido llevándose una tortuga a casa, 9 años de prisión y una multa de 21 mil pesos en caso de resultar culpable de los cargos que se le imputan: amenazar la vida de una especie animal protegida al sustraerla de su habitat natural.
Que quiénes fueron los heroicos hombres que atraparon a este peligroso criminal: dos policías municipales, quienes desde ese día debieron haber sido reconocidos por Greenpeace y el partido verde ecologista como verdaderos responsables del orden ambiental en nuestra ciudad.
Yo, como la mayoría lo sabe, estoy del lado de la tortuga, nada tiene que andar haciendo uno con estos animales que añoran el mar que hubo en este sitio, y que no dudo siga debajo de nosotros, cuando a mi casa se mete una rana suelo arrojarla al exterior, si se puede cerca de una fuente de agua, lo malo es que con estas lluvias algunas que entraron a mi casa murieron por el veneno contra las cucarachas que usamos, pero las que sobrevivieron, las arrojé a la calle con la intención de que se reproduzcan y compartan esa resistencia al veneno, si en el futuro las casas de los juarenses se ven invadidas por ranas superpoderosas, la culpa es mía.
Insisto, a mi ver, toda criatura viviente merece respeto, salvo las cucarachas y las moscas, tampoco amo a las viudas negras porque son muy peligrosas, pero si las matamos a todas, quién se comería a las moscas y las pequeñas cucarachas, yo no.
En fin, que lo que hizo este señor estuvo mal, pero una sanción administrativa hubiera sido suficiente, una multa que el pobre pudiera pagar en abonos y servicio comunitario como han sugerido otros.
Pero no, sustraer a una especie protegida es un delito federal, se persigue de oficio y el hombre al parecer, tendrá que pagar su falta como lo estipula le ley, no todo está perdido, aunque es poco probable, existe la posibilidad de que le toque un juez con algo de criterio y le haga la multa correspondiente al enemigo número uno del pais, y si este no cuenta con el recurso económico suficiente, la pague, paradójicamente, en especie, es decir con servicio comunitario, además de que el caso quedaría como antecedente y sobre todo, prueba palpable de que el gobierno va con todo contra el crimen.
Despúes de ese chiste de mal gusto, admito que elegir entre la libertad de una tortuga (cuyos años parecen no pasarle por encima como a uno) y la de un indiciduo de 35 años, prefiero la de este aunque contamine más el mundo, como si nada más él lo hiciera o fuera a hacer.
Soy consciente de la importancia de la vida animal, y más aquí donde nos tocó vivir, los ecosistemas desérticos tienen un equilibrio igual o más delicado que otros, por poner un ejemplo, el muro que construye Estados Unidos con la frontera mexicana, causará un daño bastante serio al ambiente que las denuncias en contra de este deberían llevarse a cortes internacionales.
Sin embargo, parece que a nuestras autoridades no les importa el clima social, el deterioro y contaminación moral en que vivimos, así como la ley se aplicó sobre este señor, me gustaría verlos con ese rigor enfrentarse a la industria maquiladora que cada semana contamina nuestra agua en una proporción que hasta ahora nadie se atreve a investigar.
Por el otro lado, y regresando a la contaminación social y política del pais, parece que eso no es urgente, no es necesario demostrarle a los delicuentes que lo que hacen está mal, eso lo sabemos todos, incluso la ley, pero que mejor que decirle a la sociedad que el Estado no permite delitos ambientales, actos que atentan contra la supervivencia no sólo de los animales, sino de la humanidad, nada más lamentable que sustraer una tortuga de su espacio natural, eso si es grave, eso es atentar contra el futuro, eso es casi como una conspiración, traición a la patria, que digo a la patria, al mundo entero, el narco no afecta al medio ambiente, al contrario, colabora en nuestra lucha contra la sobrepoblación. Las emisiones de plomo son caso aparte.
Pero todo esto tiene solución, dado que el caso ha despertado en nosotros la conciencia ecológica, sugiero que la población de Juárez solicite que se nombre a la ciudad Santuario Nacional de todas las tortugas existentes y por haber, que cada miembro de la familia tenga bajo su resguardo por lo menos una tortuga, o más de una en caso de que su posición económica se lo permita, iniciemos un programa de “adopte una tortuga y proteja su vida y su patrimonio”, creánmelo sería la solución a todos nuestros problemas:
-En caso de sorprender a un ladrón en su casa, ya no lo tiene que madrear y esperar a que llegue la policía, sometalo, sáquelo de la casa y entre las cosas robadas pongale una tortuga, se jodió el ladrón, 9 años de cárcel
-En las tiendas de autoservicio entrene a los dependientes para que entre el dinero que le entrega al ladrón pueda echarle una tortuga diminuta, mocos, 9 años de cárcel
-Si se da la triste situación de que sus hijos sean secuestrables, pongales una tortuga en la lonchera o en uno de los bolsillos del pantalón, que secuestro ni que nada, los cabrones tambien secuestraron una tortuga, asi que nueve años de cárcel
-Acondicione su auto lo mas humanamente posible para que pueda traer siempre una tortuga en el, así cuando se lo roben, levante una denuncia no por robo de auto (que le tomara unas tres horas) sino por robo de tortuga, y zaz, 9 años de cárcel.
-Si se da el triste caso de que usted sea ejecutable (ya lo somos todos) puede adquirir una tortuga del tamaño adecuado para cubrirse el pecho, por medio de algún artefacto que todavía no se me ocurre, pero puede usar unos de esos que sirven para cargar un bebe, y así puede andar por la calle tranquilamente, si le toca la mala suerte de andar en el lugar equivocado en el momento equivocado, procure que los disparos tambien le toquen a la tortuga, el guey que lo mató, pagará con 9 años de cárcel por haber matado a este noble animal mientras se lo llevaba a usted entre las patas (de la tortuga)
-las amas de casa pueden cargar una tortuga en sus bolsos, asi en vez de gritar que le estan robando la bolsa, muy tranquilamente podra decir que ese cabrón le acaba de robar su tortuga, la policia actuará de inmediato y someterá a ese criminal y lo llevará directamente al CERESO
-Apoye las investigaciones cientificas, así lograremos crear una especie de tortuga mutante que pueda vivir dentro de las baterias de los autos, así cuando el drogo de la esquina se la robe, aseguremos que sea la última vez que lo hace, al menos en los siguientes nueve años
Situaciones como estas son las que nos deben abrir los ojos, no dejemos que sólo los criminales se aprovechen del sistema judicial, seamos proactivos, defendamos a las tortugas, es mas, hay que nombrarlas nuestra mascota municipal, en parte para protegerlas y en otra para recordarles a nuestras autoridades que hay animales igual de lentos y torpes*, pero que merecen más respeto y que de perdida, nos pueden servir de algo.
*Antes de que los auténticos amantes de las tortugas me reclamen algo, admito que estos animales (las tortugas) por muy lentos y torpes que sean, caminan hacia adelante, algo que deberíamos aprender de ellas.
Aclaración:a las 5:40 del miércoles 24 de septiembre Raul Manuel Cadena Villalobos salio libre bajo fianza y esta en espera de la resolución del Juzgado Quinto de Distrito, podría obtener una condena de cuatro meses a nueve años de cárcel.Pasó 24 días en el CERESO.
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